Yoga para reiniciar la vida

Jóvenes, adultos y adolescentes integran este nuevo espacio gratuito de encuentro

Tulcán, 2 de junio de 2022
Redacción Vínculo
Las clases abiertas a todo público se realizan los sábados en un bosque cercano al colegio Cristóbal Colón.

Una hora de yoga y se “reinicia la vida” de algunos practicantes de esta práctica física y espiritual en Tulcán.

Van cerca de ocho meses que dos jóvenes comenzaron a dar clases gratuitas de yoga en la ciudad y poco a poco acuden a un bosque cercano a la escuela Colón y del río Bobo.

"Surgió la idea con Andrés Chamorro porque queríamos cambiar el sentido cultural de tomar o beber: cambiar lo interno", dice Lady Martinez. Ella es ingeniera en Comercio Exterior de empresas pero conoció el Yoga hace 7 años y dá las clases todos los sábados a las 8 de la mañana. 

Anteriormente se lo practicaba en el gimnasio de tae kuan do del Parque del 8, pero, dependiendo de la disponibilidad de este se lo ha realizado en el Parque de los Pastos. Sin embargo se ha hecho del bosque ubicado bajo la Escuela Cristobal Colón, el punto de encuentro.

Para Martínez la idea de practicar yoga es interesante y sí les gusta a las personas pero que a veces estas se detienen porque hay la creencia de que se necesita ser flexible. Sin embargo es un proceso en el que se avanza progresivamente la flexibilidad.

Sin embargo no es solo la flexibilidad lo que se trabaja. “Se trabaja mente, respiración y espíritu y a través de eso generamos un cambio psíquico en nosotros. Nuestra perspectiva del mundo cambia", explica.

Jacob Bolaños, estudiante de psicopedagogía de la Universidad Técnica del Norte y participante de las clases de Yoga, indica que es una iniciativa positiva.

"Aquí en nuestra ciudad, la falta de información o el incentivo ha sido siempre una limitante para la apertura y el surgimiento de algunos espacios como este. Se siente bien encontrar un grupo con el cual se pueda compartir sentimientos, experiencias y caminos". 

Martínez afirma que hay muchas personas que lo practican individualmente, no necesariamente en un club o a nivel de cursos.  

"Me siento alegre que el grupo vaya creciendo” afirma, ya que según indica, es gratificante que una haya una práctica se la pueda compartir con los demás como un medio para despertar la conciencia.

“El hecho de que la gente acuda a esta herramienta es porque todos estamos buscando ese sentir profundo con cada uno", finaliza.